JESÚS HIZO LA VOLUNTAD DEL PADRE

Biografía de Doyle Davidson:

Doyle Davidson nació en una granja cerca de Sarcoxie, Missouri, en 1932. Él sirvió como miembro médico de un hospital de la Marina de los Estados Unidos durante la guerra de Corea, pasando 27 meses en Yokosuka, Japón. Después regresó a los Estados donde fue admitido por la Universidad de Missouri en la Facultad de Medicina Veterinaria en 1958. Justo antes de entrar a la Facultad de Veterinaria, Dios lo visitó y le dijo: «Yo no quiero que seas veterinario, quiero que seas ministro del evangelio». Él no obedeció a Dios ese día y continuó con sus planes y recibió un doctorado en Medicina Veterinaria. Él se mudó al norte de Texas y estableció con éxito la práctica veterinaria equina.

En 1968 Dios se movió en la vida de Doyle y por dos años, la presencia del Señor lo acompañó en su coche preguntándole cuándo iba a predicar el evangelio. El Señor lo dirigió en 1969 a vender su hospital y él lo obedeció. El 2 de enero de 1970, la venta fue finalizada y él se alejó, sin saber a dónde iba a ir. Aunque había nacido de nuevo cuando era un niño pequeño, Jesús vino a ser Señor de su vida ese día y él fue bautizado posteriormente en el Espíritu Santo y en agua. Dios lo mandó a Israel en 1974, ungiéndolo para predicar el evangelio en la Tumba del jardín el 16 de junio con el pasaje de Hechos 1:8 ardiendo en su corazón. En 1980, Dios instruyó a Doyle para que hablara a la gente de Plano, Texas. Él estableció el ministerio de Water of Life (Agua de Vida) y en 1982 terminó con su práctica veterinaria.

Doyle es llamado como un siervo y apóstol del Señor Jesucristo. En 2017 el Señor le dijo: «Te he elegido y enviado a las cuatro esquinas de la tierra para que lleves mi palabra sin desesperación o miedo».

INTRODUCCIÓN

En noviembre de 1988, recibí un pedido de un pastor en África por algunos de nuestros casetes. Dios me dirigió que le mandara diez casetes de enseñanza y así lo hice. Recibimos ocho pedidos más de casetes en noviembre y diciembre de 1988 y luego nos pidieron 6000 en 1989.

Para junio de 1990, habíamos enviado más de 88,000 horas en casetes de enseñanza y alabanza a 9,000 personas en los Estados Unidos de América y a 18 países extranjeros.

En agosto de 1989, Dios me dirigió poner a disposición en casetes las enseñanzas que Él me ha dado “El Evangelio y sus Beneficios” y “La Sangre de Jesús”. Desde agosto de 1989, hemos enviado, gratis bajo petición, un casete cada mes durante 20 meses, empezando con el primer casete de la serie: “Él Resucitó”.

Dios ahora me ha dirigido en poner las enseñanzas de “El Evangelio y sus Beneficios” y “La Sangre de Jesús” en libro y distribuirlos otra vez, gratis bajo petición.

En 1 Corintios 9:9-18, el apóstol Pablo dice:

9 En la ley de Moisés está escrito: «No pondrás bozal al buey que trilla.» ¿Se preocupa Dios por los bueyes

10 o lo dice enteramente por nosotros? Sí, por nosotros se escribió esto, porque con esperanza debe arar el que ara y el que trilla, con esperanza de recibir del fruto.

11 Si nosotros sembramos entre vosotros lo espiritual, ¿será mucho pedir que cosechemos de vosotros lo material?

12 Si otros participan de este derecho sobre vosotros, ¿cuánto más nosotros?
Sin embargo, no hemos usado de este derecho, sino que lo soportamos todo por no poner ningún obstáculo al evangelio de Cristo.

13 ¿No sabéis que los que trabajan en las cosas sagradas, comen del Templo, y que los que sirven al altar, del altar participan?

14 Así también ordenó el Señor a los que anuncian el evangelio, que vivan del evangelio.

15 Pero yo de nada de esto me he aprovechado, ni tampoco he escrito esto para que se haga así conmigo, porque prefiero morir, antes que nadie me prive de esta mi gloria.

16 Si anuncio el evangelio, no tengo por qué gloriarme, porque me es impuesta necesidad; y ¡ay de mí si no anunciara el evangelio!

17 Por eso, si lo hago de buena voluntad, recompensa tendré; pero si de mala voluntad, la comisión me ha sido encomendada.

18 ¿Cuál, pues, es mi recompensa? Que, predicando el evangelio, presente gratuitamente el evangelio de Cristo, para no abusar de mi derecho en el evangelio.

Esto es lo que Dios me ha instruido hacer, dar el evangelio de Cristo gratis.

Dios me ha revelado estas enseñanzas en lo últimos 20 años. Si tienes oídos para oír, deja a un lado tu orgullo religioso, tu tradición religiosa, tu tradición de hombre, tu denominación, tu teología y tu enseñanza de la escuela bíblica. 1 Corintios 8:1 nos dice que el conocimiento te envanece, pero el amor edifica. Es 2 Juan 1:6 declara: “6 Y éste es el amor: que andemos según sus mandamientos”. Y Juan 14:23 declara: “El que me ama, mi palabra guardará”.

Si tú amas a Dios, tú guardarás sus palabras, si tú guardas sus palabras, tú guardas su comisión y si tú guardas su comisión, tú predicarás el evangelio. Si tú predicas el evangelio, Dios te enviará y si Dios te envía, será porque tú estás predicando el evangelio.

Si tú predicas el evangelio, es el poder de Dios para la salvación a cualquier que crea, a los judíos primeramente y también a los griegos. Como Romanos 1:17 dice: “Pues en el evangelio, la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: «Mas el justo por (Su) fe vivirá»”. (cita en Habacuc 2:4).

CAPÍTULO 1

JESÚS CAMINÓ COMO UN HOMBRE

En los primeros libros, vimos que el evangelio de Cristo es la muerte, el entierro y la resurrección del Señor Jesús y que el evangelio es el poder de Dios para salvación de cualquiera que crea, primeramente al judío y también al griego. ¡Vimos que el evangelio es siempre una bendición, que el evangelio siempre es con poder y el evangelio es siempre "sí"!

En nuestros siguientes libros, vamos a ver como Dios reconcilió al hombre a sí mismo por medio del evangelio. Vamos a ver como Jesús se comportó en los tres días en que ocurrieron los eventos del evangelio y vamos a ver que si creemos en el evangelio, podemos tener las bendiciones en nuestras vidas.

Jesús Aprendió Obediencia

En este libro, vamos a examinar algunos de los eventos que tomaron lugar en la vida del Señor Jesucristo antes de Su muerte, entierro y resurrección. Estos eventos no son en el sentido estricto, los eventos del evangelio mismo, pero Jesús tuvo que pasar por ellos antes que el evangelio tomara lugar. Hebreos 5:8 nos dice que Jesús aprendió obediencia por medio de las cosas que el sufrió o experimentó. Si Jesús no hubiera obedecido al Padre, Él no hubiera podido soportar la cruz.

Hebreos 2:18 dice que Jesús sufrió siendo tentado. La única vez que sufriremos es cuando somos tentados a no obedecer a Dios. Cualquier otro tipo de experiencia, no importa que tan dolorosa sea, no es sufrimiento. Jesús sufrió, Él fue tentado, fue como Él aprendió obediencia.

Yo alabo a Dios, que me enseñó como Jesús caminó en la tierra, como Él se acercó a la cruz y como Él caminó en obediencia a Dios. Lo que yo quiero mostrarte en este libro es que Jesús siempre tuvo comunicación perfecta con el Padre y Él siempre hizo la voluntad del Padre.

El apóstol Pablo nos dice en Filipenses 2:7 que cuando Jesús vino a la tierra, Él se despojó a Sí Mismo. La frase viene de la palabra Griega Kenoo y significa que Él se vació de Sí Mismo de todos sus privilegios Divinos y autoridad. Aunque Él era Dios, Él no caminó como Dios. En cambio Él caminó como un hombre.

Jesús Era un Hombre

Jesús era un hombre. El Espíritu de Jesús el hombre era el Hijo del cielo, pero Su alma y Su cuerpo vinieron de María, Su madre. Él fue alimentado en el vientre por María, Su madre y Él recibió Su sangre de María, Su madre.

Romanos 1:3 dice que Jesús "era del linaje de David según la carne". Hebreos 2:16 dice que "él socorrió (tomó) sobre él la descendencia de Abraham". Gálatas 4:4 nos dice que "Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la Ley". Tan notable como puede sonar a los oídos religiosos, Jesús era un hombre.

Hasta que Jesús tenía unos 30 años de edad, Él no operó en el poder de Dios. Hubo una diferencia notable en Su sabiduría y en Su habilidad para hacer preguntas, pero Él no caminó en el poder de Dios. Él no realizó algún milagro. Él no sanó a personas. Él no resucitó a las personas de entre los muertos. Él no perturbó a demasiada gente. De hecho, no te puedo decir que Él perturbó a alguna persona.

Sin embargo, cuando Él tenía unos 30 años de edad, Jesús fue bautizado en el río Jordán. Cuando Él salió del río, orando, los cielos fueron abiertos y el Espíritu de Dios descendió en Él, en la figura del cuerpo de una paloma.

Él fue bautizado en el Espíritu Santo y fue inmediatamente llevado al desierto por 40 días para ser tentado. Ahí Él ayunó y oró y venció al demonio y regresó a Galilea en el poder de Dios, en la habilidad del Espíritu Santo.

En Hechos 10:38, el apóstol Pedro dice como Dios ungió a Jesús de Nazaret con el Espíritu Santo y con poder. La palabra "poder" es de la palabra Griega dunamis y significa habilidad, en este caso, la habilidad de Dios. Él fue alrededor haciendo el bien y sanando a todos los que estaban oprimidos por el demonio.

Así, hasta que Jesús tenía unos 30 años de edad, Él no operaba en el poder de Dios. Después de Su bautismo en el Espíritu Santo, Él era todavía era un hombre, pero Él operó en la habilidad de Dios. Él caminó en esta tierra, como nuestro ejemplo y entonces Él fue a la cruz.

Jesús Sufrió las Muertes

Quiero ver en Isaías 53:8-9 por un momento. El capítulo 53 de Isaías es una profecía acerca del Señor Jesucristo y Su muerte, entierro y resurrección, profetizado por Isaías hace 700-750 años antes de que Jesucristo viniera a la tierra:

8 Por medio de violencia y de juicio fue quitado; y su generación, ¿quién la contará? Porque fue arrancado de la tierra de los vivientes, y por la rebelión de mi pueblo fue herido.

9 Se dispuso con los impíos su sepultura, mas con los ricos fue en su muerte.
Aunque nunca hizo maldad ni hubo engaño en su boca,

En el verso nueve, la palabra "muerte" es plural en hebreo. Muertes. Jesús murió físicamente, Su alma y espiritualmente.

La muerte física habla por sí misma. Su cuerpo murió y fue a la tumba por tres días. Según el Salmo 16:10: Su cuerpo no vio corrupción. Hablaremos más acerca de esto en nuestros siguientes libros.

Su alma murió cuando fue hecho ofrenda por nuestros pecados. Isaías 53:10 dice:
"Cuando haya puesto su vida en expiación por el pecado". El alma de Jesús tuvo que ser sacrificada para que nuestros pecados fueran perdonados.

La muerte espiritual ocurrió cuando Jesús fue cortado de Dios. El pecado que fue puesto en Jesús, mi pecado y el tuyo, el pecado de la raza humana fue puesto sobre Él, cortado de Dios. Cuando Él fue cortado de Dios, descendió al infierno.

El pecado es lo que separa a las personas de Dios. Hay una muerte que es la espiritual, pero tú no estás en el infierno. Sin embargo tú finalmente iras al infierno, si sufres la muerte espiritual. Cuando Jesús fue hecho pecado, Él fue cortado del Padre y esa muerte espiritual incluyó lo que finalmente incluye toda la muerte espiritual: Jesús fue al infierno.

Jesús sufrió las muertes, así como Isaías profetizó. Él sabía, mientras Él caminó sobre esta tierra, que la voluntad de Dios era que Él muriera, fuera enterrado y fuera resucitado otra vez. Pero aun sabiendo esto, Jesús dijo que Él siempre hizo la voluntad del Padre.

Hagamos a Jesús Nuestro Ejemplo

Nosotros sabemos que en el nuevo pacto, el Padre dijo que todos serán enseñados por Dios y que todos lo conocerían, desde el menor hasta el mayor de ellos. Así que simplemente voy a compartir con ustedes varias escrituras que Dios me ha dado durante los años en el orden que Él desea.

Si tú estás dispuesto a recibir estas palabras, está bien. Si tú las rechazas, Jesús dijo que ellas te juzgarán. No te van a juzgar, porque yo estoy compartiéndolas, pero porque ellas son Sus palabras y porque Él me dijo que las compartiera.

Si alguien más habló estas palabras y no son por medio del Espíritu Santo o si yo las hablé y El Espíritu Santo no me está dirigiendo, estas palabras no te van a hacer nada excepto producir muerte y ya tenemos suficiente de eso. Entonces, como veremos en las siguientes páginas como Jesús se comportó Él mismo en la tierra, ten en cuenta que Dios desea que tú y yo hagamos a Jesús nuestro ejemplo.

Yo puedo enseñar estas palabras porque yo camino de este modo y camino de este modo porque Dios me ha dado la revelación. Si tú puedes recibir la revelación de lo que estoy diciendo, si tú crees lo que Dios está diciendo, tú lo recibirás en tú corazón y nunca tendrás miedo en hacer cualquier cosa que Dios te diga. No estoy diciendo que no temerás. Estoy diciendo que no tendrás miedo en obedecer a Dios, vas a salir de eso. Como tú has recibido a Jesucristo, tú caminarás en Él.

CAPÍTULO 2

JESÚS SE COMUNICABA CON EL PADRE

Vamos a ver el modo en que Jesús se comunicaba con Su Padre mientras Él estuvo en la tierra. En 1973, el Padre me dijo: "Quiero que tomes la Biblia y yo te voy a enseñar acerca de mi hijo. Voy a enseñarte acerca de su vida y Él va a ser tú ejemplo. Tú vas a caminar en la tierra como Él caminó". Yo estaba asombrado al pensar que una persona podría caminar como Jesucristo caminó.

Ve en 1 Juan 2:6. Este verso fue hablado por el apóstol Juan como el Espíritu Santo le daba que hablara:

6 El que dice que permanece en él,[Jesús] debe andar como él anduvo.

Estas palabras son difíciles para la mente humana, el alma humana, es decir, la voluntad, el intelecto y las emociones, para comprender. Habiendo crecido en un hogar religioso en los Estados Unidos de América, es una nación religiosa, me asombré que alguien podría pensar que una persona pudiera caminar como Jesús caminó. No solamente este verso nos dice que podemos, dice que cada uno de nosotros "... debe andar como él anduvo". Es nuestro deber caminar como Jesucristo caminó.

Dios Juzgará al Mundo

Hechos 17:31 declara que Dios ha establecido un día de justicia en el cual Él juzgará a la gente del mundo por un hombre justo, Jesús. Yo estaba sorprendido cuando leí estas escrituras describiendo como Jesús caminó y me di cuenta de que Dios quería que caminara como Él caminó.

Mira en Hechos 17:30-31:

30 Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, (refiriéndose a idolatría) ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan;

31 por cuanto ha establecido un día en el cual juzgará al mundo con justicia, por aquel varón a quien designó, acreditándolo ante todos al haberlo levantado de los muertos.

Dios juzgará al mundo, juzgará las naciones, te juzgará a ti y a mí, en el día que ha establecido por ese hombre, el Señor Jesucristo. Será un juicio justo y si tú y yo vamos a recibir recompensa por nuestro servicio, nosotros tendremos que caminar como Jesús caminó.

Ahora, si yo no temiera a Dios, yo haría lo que yo quisiera. Yo amo a la iglesia o yo no diría esto, pero la iglesia Americana es una organización rebelde. Apenas conoce a Dios.

La mayoría de los predicadores en este país apenas conocen a Jesús o cualquier cosa acerca de Él. Ellos no hacen la voluntad del Padre. Ellos hacen su propia voluntad. Todos ellos tienen un plan y dudo seriamente, si muchos de ellos consideran que un día vendrá, cuando ellos serán juzgados con justicia y Jesucristo como su ejemplo. Si lo hicieran, ellos no harían acciones rebeldes como las que hacen en la tierra.

Me maravillo de la religión Americana. No es Cristianismo, es simplemente religiosa. Me maravillo de la rebelión, de los caminos tercos de los americanos religiosos y de su falta de interés de lo que Jesucristo piensa.

Nuestras agencias de policías, nuestros tribunales y nuestras iglesias son todas muy similares. Por supuesto, eso no es sorprendente, porque Ezequiel capítulo 22 nos dice que si primeramente los profetas desobedecen a Dios, hay una declinación de toda la sociedad.

La declinación empieza con los profetas, después va a la Iglesia de Dios, después a los jueces, cortes, políticos y continúa con la gente. Yo veo una indiferencia por los seres humanos y una indiferencia por hacer la voluntad del Padre, tanto en la iglesia como en los tribunales de América.

Dios Nos Oye Siempre

Cuando empecé a estudiar la vida del Señor Jesucristo, Yo escribí como 24 características acerca de Su vida. Una de las características que siempre me asombró fue como Jesús se comportó en la tierra. Vi como Él tenía una comunicación perfecta con el Padre.

Mira en Juan 11:41-42. Recuerdo cuando el Padre me estaba enseñando estos versos. Es tan fresco en mi corazón, es casi como si fuera ayer. Quiero que leas algo que todavía me sorprende:

41 Entonces quitaron la piedra de donde había sido puesto el muerto [Lázaro]. Y Jesús, alzando los ojos a lo alto, dijo:—Padre, gracias te doy por haberme oído.

42 Yo sé que siempre me oyes; pero lo dije por causa de la multitud que está alrededor, para que crean que tú me has enviado.

¿Puedes creer que Dios te oye siempre? ¿Está eso dentro en tú corazón? ¿Es algo que la tradición religiosa te ha enseñado? O ¿Te han enseñado que Dios retira su presencia de ti, que esconde Su rostro de ti y quiere que sufras?

¿Sabes que Dios te oye siempre? No te pregunté si crees estos versos o entiendes estos versículos. Te pregunté si sabes que Él te oye siempre.

Si tú sabes que Dios te oye siempre, tú no siempre tendrás miedo. Tú no orarás y luego preguntarás: "Dios, ¿Oíste eso?" Él te oye siempre.

Jesús dijo: "Yo sé que tú siempre me oyes". 1 Juan 2:6 dice que si permanece en Jesús, debería también andar como Él anduvo. Si tú caminas como Él caminó, tú sabes que el Padre te oye siempre.

Si tú puedes recibir esto en tu espíritu y crees que Dios te oye siempre, vencerás tu duda e incredulidad. ¡Dios te oye siempre! Si Dios te oye siempre, tú no tienes otra cosa de que preocuparte.

La Iglesia No Cree

A veces me siento absolutamente abrumado con la ceguera de los guías religiosos de América y las herejías que enseñan. Si en verdad creyeran que Jesús es nuestro ejemplo, que deberíamos caminar como Él caminó y llegará un día cuando seremos juzgados de acuerdo a Jesucristo y Su justicia, ellos cambiarían su enfoque entero acerca de Cristianismo. No hay manera de que tú creas en Dios y dices que crees en Dios y no camines como Jesús caminó. Es imposible.

Tú dices: "Bien, Doyle, Yo no pienso así. Yo no creo que Dios me oye siempre. Yo no soy digno. Yo no soy así". Ese es todo tu problema. Tú no crees que Jesucristo es tú ejemplo.

La iglesia no cree que Jesús murió por ti y que resucitó. La iglesia no cree que Él te santificó y te separó para Dios, que Él te hizo rey y sacerdote en esta tierra y que tú puedes reinar y gobernar en esta vida por medio de un Cristo Jesús. La iglesia no cree esto.

Tenemos maestros falsos perpetrando falsas doctrinas en la iglesia de América. Estas falsas doctrinas son aceptadas y habladas en el nombre de Jesús continuamente y la gente abraza con todo el corazón estas doctrinas. Yo solía creer en ellos también, pero ya no lo hago. No tengo tiempo para doctrinas falsas.

Dios Oye Mis Oraciones

Jesús dijo que Él sabía que el Padre lo oía siempre. Cuando Dios me estaba enseñando esto en 1973, yo estaba abrumado con el pensamiento de que Dios me oiría siempre. Entonces un día, me quedé meditando sobre el hecho de que Dios me escucha y me oye y sus oídos están abiertos a mis oraciones.

Cuando estaba meditando en esto y como Jesús dijo que Él sabía que el Padre lo oía siempre, de repente pensé, y sé que El Espíritu Santo me reveló esto, "Dios tiene un registro de todos mis pecados y Él oye toda palabra injusta que hablo. Si, como Jesús declara en Mateos 12:36, yo tengo que dar cuenta de cada palabra ociosa que hablo, entonces seguramente Dios escucha mis oraciones, también".

Sin embargo la gente religiosa tiene un modo extraño para orar. Ellos oran como si Dios estuviera de viaje o no quiere oírlos. Ellos hacen sonar que es muy difícil entrar al cielo, cuando en realidad no hay algún problema en absoluto. Todo lo que debes hacer es ir audazmente al cielo con la sangre de Jesús. Tú puedes estar ahí cada vez que quieras. De hecho, tú deberías vivir ahí.

Pero cuando estaba meditando, el Espíritu de Dios empezó a aclarar en mi corazón y sacar la basura religiosa de mí. Él empezó a enseñarme que Jesús conocía al Padre y siempre lo oía, tú y yo podemos conocerlo también. Es tremendo saber que el Padre siempre te oirá.

CAPÍTULO 3

JESÚS EN EL DESIERTO

Mencioné anteriormente que Jesús no operó en el poder de Dios hasta que Él fue bautizado en agua y en el Espíritu Santo, fue guiado al desierto por el Espíritu Santo, ayunó, oró y venció a Satanás. Sólo entonces Él regresó a Galilea en el poder del Espíritu Santo.

Es notable pensar que Jesús era un hombre y que Él es nuestro ejemplo. Es notable pensar que Jesús pudo haber sido injusto. Si Él no hubiese sido injusto, ¿Por qué Satanás se molestó en tentarlo?

Habacuc 2:4 dice: "Aquel cuya alma no es recta se enorgullece". El Espíritu de Jesús el hombre era del Hijo del cielo. Ese Espíritu era perfecto y justo. Sin embargo Su alma y Su cuerpo vinieron de Su madre terrenal y tuvieron que ser hechos íntegros, al igual que como nuestro espíritu, alma y cuerpo serán hechos íntegros. Seremos íntegros cuando caminemos como Él caminó.

Él Que Hace Justicia Es Justo

Mateo 3:13 empieza:

13 Entonces Jesús vino de Galilea al Jordán, donde estaba Juan, para ser bautizado por él.

14 Pero Juan se le oponía, diciendo:—Yo necesito ser bautizado por ti, ¿y tú acudes a mí?

15 Jesús le respondió:—Permítelo ahora, porque así conviene que cumplamos toda justicia. Entonces se lo permitió.

La palabra "justicia" significa ser declarado justo. Para ser declarado justo, tú debes ser guiado por el Espíritu de Dios y todo lo que hagas debe de ser la voluntad de Dios.

Nos enseñaron que la justicia era una posición. Nos enseñaron que fuimos hechos justos cuando recibimos a Jesús.

Sin embargo estudiando la vida de Jesús, yo empecé a ver que la justicia es por fe y está en el corazón. Entonces vi que Jesús era un siervo justo. Isaías 53:11 profetiza acerca de Jesús:

11 Verá el fruto de la aflicción de su alma y quedará satisfecho; por su conocimiento justificará mi siervo justo a muchos, y llevará sobre sí las iniquidades de ellos.

Jesús es llamado un siervo justo. Su Espíritu era del Hijo del cielo, pero Él tenía un alma y un cuerpo como los nuestros. Su alma y Su cuerpo tenían debilidades como las nuestras y Él pudo haber cedido a las tentaciones que enfrentó. Lo que hizo justo a Jesús fue Su fe y Su obediencia al Padre.

1 Juan 3:7 dice:

7 Hijitos, nadie os engañe; el que hace justicia es justo, como él es justo.

El que hace justicia es justo, no él que sabe todas las definiciones de la palabra.

Mira otra vez en Mateo 3:15:

15 Jesús le respondió:—Permítelo ahora, porque así conviene que cumplamos toda justicia. Entonces se lo permitió

Jesús fue llamado un siervo justo. Era la voluntad de Dios que Juan el Bautista bautizara a Jesús en el río de Jordán y Él cumpliera la justicia de Dios, porque Él fue guiado por el Espíritu y obedeció.

Jesús Complació al Padre

Continuamos con Mateo 3:16-17:

16 Y Jesús, después que fue bautizado, subió enseguida del agua, y en ese momento los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma y se posaba sobre él.

Jesús acababa de recibir el bautismo en el agua y el bautismo en el Espíritu Santo y Él oyó esto:

17 Y se oyó una voz de los cielos que decía: «Éste es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia.»

Complació al Padre que Jesús fuera ser bautizado en el agua y en el Espíritu Santo y el Padre lo dijo. Jesús es nuestro ejemplo, entonces nuestro bautismo en el agua y el bautismo en el Espíritu Santo complacen al Padre. Recuerda que 1 Juan 2:6 nos dice: "6 El que dice que permanece en él, debe andar como él anduvo".

Jesús Fue Guiado por el Espíritu

De acuerdo con Lucas 3:23: "Jesús, al comenzar su ministerio, era como de treinta años". Entonces, en Lucas 4:1, vemos:

1 Jesús, lleno del Espíritu Santo, volvió del Jordán y fue llevado por el Espíritu al desierto

2 por cuarenta días, y era tentado por el diablo…

El Padre estaba complacido de que Jesús subiera del agua y fuera bautizado en el Espíritu Santo. El Padre fue igualmente complacido cuando Él entró en el desierto por 40 días para ser tentado por el diablo. Jesús aún era justo y Él fue justo porque Él estaba haciendo todo lo que Dios le pedía hacer. Él estaba siendo guiado por el Espíritu de Dios. Para ser guiado por el Espíritu es caminar por fe.

Jesús Fue Tentado por el Diablo

Jesús fue guiado por el Espíritu en el desierto por 40 días para ser tentado por el diablo y como Lucas 4:2 dice:

…No comió nada en aquellos días, pasados los cuales tuvo hambre.

Al final de los 40 días, tres tentaciones ocurrieron que el Espíritu Santo pensó que eran bastante importantes como para registrarlas. Están registradas por Mateo y Lucas, y el apóstol Pedro nos dice que los hombres santos de Dios sólo escribieron cuando el Espíritu Santo se movía sobre ellos. Por lo tanto, debemos de poner atención.

Lucas 4:3 empieza:

3 Entonces el diablo le dijo:—Si eres Hijo de Dios, di a esta piedra que se convierta en pan.

4 Jesús, respondiéndole, dijo:—Escrito está: “No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra de Dios.”

Jesús había sido tentado 40 días, guiado por el Espíritu Santo y Satanás sabía que Él tenía hambre. Él había estado ayunando por 40 días. Satanás dijo: "di a esta piedra que se convierta en pan". En efecto, él dijo: "Yo quiero que tú abuses de tu autoridad". Jesús le contestó, diciendo: "Escrito está…"

Jesús no sólo arrancó Su respuesta de Deuteronomio 8:3 y la citó. Jesús sólo habló lo que Él oía Su Padre hablar. En Juan 7:16, Jesús dijo que Su doctrina no era de Él. En Juan 5:30, Él dijo: "Según oigo, así juzgo". En Juan 14:24, Él dijo: "La palabra que habéis oído no es mía, sino del Padre que me envió".

Jesús sólo habló lo que Él oyó hablar de Su Padre. El Padre, por el Espíritu de Dios, le reveló: "… Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra de Dios”. Jesús por el Espíritu Santo venció al diablo con fe.

Todos los Reinos del Mundo

Lucas 4:5 continúa:

5 Luego lo llevó el diablo a un alto monte y le mostró en un momento todos los reinos de la tierra.

Las personas religiosas dicen que el diablo no pudo llevar a Jesús. Ellos dicen: "Él no puede llevarme; Yo soy "comprado por la sangre". Tú puedes ser "comprado por la sangre", pero antes que Jesús muriera y fuera enterrado y resucitara, Él venció al diablo y para vencer al diablo, Él tuvo que ser llevado a la montaña.

Mira en Lucas 4:5 otra vez:

…5 le mostró en un momento todos los reinos de la tierra.

6 y le dijo el diablo…

Algunas personas son tan "santas" que no piensan que el diablo puede hablarles. El diablo le dijo a Jesús:

6 —A ti te daré todo el poder [autoridad] de estos reinos y la gloria de ellos,

Todo el poder, toda la autoridad ¿De qué? Todos los reinos del mundo y todo el honor que va con ellos. El diablo estaba hablando con el Hombre del cielo, Jesús. Y él sabía quién era Él.

He oído a las personas decir que el diablo no sabía quién era Jesús hasta que el Padre dijo: "Tú eres mi Hijo amado; en ti tengo complacencia". Si es así, ¿Por qué el diablo, por medio del Rey Herodes, trató de matar a Jesús cuando era un bebé? Las personas me maravillan con su ignorancia.

El diablo continúo, en Lucas 4:6:

…porque a mí me ha sido entregada…

¿Quién entregó la autoridad al diablo? Adán, cuando él desobedeció a Dios. Fue la voluntad de Dios que Adán lo desobedeciera. Era parte del plan de Dios para reconciliar al hombre con Él, que Adán le desobedeciera. Aún más asombroso es que Dios tenía Su plan desde la fundación de la tierra. Nosotros veremos el plan de Dios en nuestro siguiente libro: "El Plan de Dios Para La Reconciliación".

A Quien Quiero la Doy

Entonces el diablo dijo en Lucas 4:6:

…y a quien quiero la doy.

Las personas religiosas te dirán que el diablo no puede hablarte con la verdad y todo lo que él diga es mentira. Si eso fuera verdad, Jesús debería simplemente haberle llamado mentiroso. O Jesús estaba confundido o las personas religiosas tienen un problema con la Biblia.

Satanás terminó, en Lucas 4:7:

7 Si tú, postrado, me adoras, todos serán tuyos.

Jesús había ayunado por 40 días, siendo tentado por el diablo y entonces el diablo le dijo que él le daría el poder, la autoridad, sobre todos los reinos del mundo.

Jesús era un siervo justo, sin embargo el Padre sabía que Él no iba a caer. ¿Por qué? Porque en Isaías 42:1: dice que el Padre sostuvo a Jesús.

Mira en Isaías 42:1:

1 Éste es mi siervo, yo lo sostendré; mi escogido, en quien mi alma tiene contentamiento. He puesto sobre él mi espíritu; él traerá justicia a las naciones.

Esta es una profecía acerca de Jesús. En esta profecía, Dios dice que Él sostiene a Jesús. El Espíritu Santo guio a Jesús en el desierto para ser tentado por el diablo 40 días y al final de ese tiempo, Satanás dijo: "Si tú, postrado, me adoras, todos serán tuyos".

Al Señor Tú Dios Adorarás

Mira la respuesta de Jesús en Lucas 4:8:

8 Respondiendo Jesús, le dijo:…

Otra vez, Jesús no simplemente citó Deuteronomio 6:13. En Juan 6:63, Jesús dijo: "Las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida". El Espíritu Santo le dio a Jesús las palabras para hablar:

8…—Vete de mí, Satanás, porque escrito está: “Al Señor tu Dios adorarás y sólo a él servirás.”

Satanás dijo: "Tú estás cansado, tú tienes hambre, tú has estado aquí durante 40 días; ahora yo te honoraré no tendrás que pasar por esto por más tiempo". Yo no sé, si esto fue lo que exactamente dijo, pero bien pudo haberlo dicho.

Cada ministerio será traído cara a cara con esta situación. Tú serás tentado para abusar de la autoridad y tú tendrás el ofrecimiento de Satanás, honorarte. Todo lo que tienes que hacer es comprometer el evangelio y arrodillarte a organizaciones religiosas (espíritus religiosos) y Satanás te tiene. Él te honorará, también. Eso es lo que ha pasado en América. Eso es lo que ha pasado en todo el mundo.

Las personas religiosas me dijeron que sin el apoyo de los hombres, no podría ir a alguna parte. Dios me dijo que si dependo del apoyo de los hombres, yo no iría a alguna parte. Así que dije: "Amén, Jesús vamos hacia adelante".

No Tentarás al Señor tu Dios

La tercera tentación que leemos está en Lucas 4:9:

9 Entonces lo llevó a Jerusalén, lo puso sobre el pináculo del Templo y le dijo:
—Si eres Hijo de Dios, tírate de aquí abajo,

10 pues escrito está: “A sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden”,

11 y “En las manos te sostendrán, para que no tropieces con tu pie en piedra.”

12 Respondiendo Jesús, le dijo:—Dicho está: “No tentarás al Señor tu Dios.”

13 Cuando acabó toda tentación el diablo, se apartó de él por un tiempo.

En otras palabras, Satanás le estaba diciendo a Jesús: "Bien, tú me has estado citando las escrituras, ahora voy a citarte algunas. Tírate, porque está escrito que Dios a sus ángeles mandará cerca de ti a que te guarden. Yo citaré la Palabra al igual que tú".

¿Qué fue lo que Satanás hizo? Él tomó la escritura fuera de contexto; él la arrebató, la torció y así es el camino del diablo. No importa quién eres; si tú tuerces las escrituras, Satanás está hablando desde tu boca.

Jesús contestó: “…No tentarás al Señor tu Dios". Torcer la escritura, sacarla del contexto y usarla incorrectamente, es tentar a Dios.

Lleno del Espíritu Santo

Ahora, quiero enseñarte que durante el tiempo que Jesús estuvo en el desierto, desde el tiempo en Lucas 4:1 en el que Él fue guiado por el Espíritu hasta el tiempo en Lucas 4:14 en el que Él regresó a Galilea, un cambio ocurrió en el alma y el cuerpo de Jesús.

En Lucas 4:1, nos dice que Jesucristo estaba "lleno del Espíritu Santo". En el verso 14, Él regresó: "en el poder del Espíritu". Durante esos 40 días, Él ayunó, oró y citó la Palabra de Dios a Satanás.

Tú no puedes convencerme, que las únicas veces que Jesús citó la Palabra al diablo son las tres veces que acabamos de leer. Él había estado resistiéndolo con Su fe todos los 40 días. Eso es lo que lo impidió caer en la tentación. ¿Qué fue lo que Jesús dijo a los discípulos en el jardín de Getsemaní? "Ora…" ¿Por qué? "…Para que tú no entres en tentación".

Jesús Humilló Su Alma con Ayuno

Además, Jesús ayunó 40 días. Isaías 58:6 dice:

6 El ayuno que yo escogí, ¿no es más bien desatar las ligaduras de impiedad,
soltar las cargas de opresión, dejar ir libres a los quebrantados y romper todo yugo?

El alma de Jesús no estaba integra. Él estaba lleno del Espíritu Santo y Su Espíritu era del Hijo del Cielo, pero Su alma y cuerpo eran de Su madre terrenal. Las personas religiosas no pueden ver que si Jesús es en verdad nuestro ejemplo, Él tenía que obedecer el Salmo 35:13 y humilló Su alma con ayuno.

Estudia el décimo capítulo de Hechos. Cornelio, el centurión de la banda italiana, era un hombre devoto, uno quien temía a Dios con toda su casa y dio
" muchas limosnas al pueblo y oraba siempre a Dios". Cuando Pedro preguntó a Cornelio por qué había mandado por él, Cornelio contestó, en Hechos 10:30:

—Hace cuatro días que a esta hora yo estaba en ayunas; y a la hora novena, mientras oraba en mi casa, vi que se puso delante de mí un varón con vestido resplandeciente,

Dios mandó a Pedro a predicar el evangelio a Cornelio porque Cornelio daba muchas limosnas, oraba a Dios siempre y ayunaba. Si tú esperas recibir cualquier cosa de Dios, tú vas a tener que hacer lo mismo.

El Poder del Espíritu

Así, entre Lucas 4:1 y Lucas 4:14, Jesús pasó 40 días ayunando, orando y Él regresó en el poder del Espíritu. Él fue al desierto lleno del Espíritu. Él regresó en el poder del Espíritu. Había un cambio en Su alma y Su cuerpo durante esos 40 días, porque Él pasó de ser lleno del Espíritu a estar en el poder del Espíritu.

Él vino a Nazaret, donde Él fue criado y Él fue a la sinagoga. Así como era Su costumbre, se levantó a leer. Las personas lo reconocieron como el hijo de José. Ellos no sabían que Él era el Mesías. Él no se veía diferente después de haber ayunado por 40 días. Él pudo haber perdido algo de peso, pero la Biblia no dice eso.

Ellos le dieron el libro del profeta Isaías y de acuerdo a Lucas 4:18, Él leyó:

18 «El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón, a pregonar libertad a los cautivos y vista a los ciegos, a poner en libertad a los oprimidos

19 y a predicar el año agradable del Señor.»

En otras palabras, Él dijo: "Lo que acabo de hablar es lo que es aceptado. Nada más, no otra clase de predicación, es aceptado y yo pasé 40 días ayunando para aprender a caminar en obediencia al Padre".

Ellos Fueron Llenos de Ira

Lucas 4:20 continúa:

20 Enrollando el libro, lo dio al ministro y se sentó. Los ojos de todos en la sinagoga estaban fijos en él.

Todos ustedes saben que pasó. Los ojos de todos en la sinagoga estaban fijos en Él y Él dijo a ellos, en el verso 21:

—Hoy se ha cumplido esta Escritura delante de vosotros.

Él continuó hablando y ellos se enojaron mucho. En el verso 28 dice:

28 Al oír estas cosas, todos en la sinagoga se llenaron de ira.

Era Su costumbre leer. Ellos nunca se habían llenado de ira antes. Ellos no le habrían dado el libro, si hubieran estado enojados. En los versos 29-30 nos dice que ellos:

29 Levantándose, lo echaron fuera de la ciudad y lo llevaron hasta la cumbre del monte sobre el cual estaba edificada la ciudad de ellos, para despeñarlo;

30 pero él pasó por en medio de ellos y se fue.

Gloria a Jesús, eso, mi amigo, ¡es reinar! Jesús pasó por en medio de ellos y siguió Su camino.

Jesús Complació al Padre

Ahora, el punto de lo que acabamos de leer es este, Jesús siempre hizo la voluntad del Padre y en todo Él complació al Padre. Incluso complació al Padre para enojar a aquellos en la sinagoga de la casa de Jesús hasta el punto, que querían matarlo.

Los 40 días en el desierto, ayunando y orando, fueron en preparación de Jesús para empezar Su ministerio y es como el Padre te preparará a ti. Él no te enviará a predicar y dejarte ser destruido.

Dios te guiará en algún lugar como Él lo hizo con Jesús. Eso es lo que Él hizo conmigo. Él me enseñó y cuando yo pude caminar en el poder del Espíritu Santo, Dios me envió a la iglesia Metodista por tres años. Yo crecí en más poder y cuando yo era capaz de caminar en el suficiente poder para reinar en la ciudad de Plano, Texas, entonces Él me guio aquí.

Él no me trajo aquí porque Yo predico una buena palabra, porque a veces yo no podía hacer que las palabras salieran de mí. Él me trajo aquí porque yo lo obedecí. Yo quiero que sepas como Dios trabaja. Yo quiero que veas la voluntad del Padre. Yo quiero que veas que obedecer la voluntad del Padre es lo que hizo a Jesús un siervo justo.

Yo pensé que Dios me iba a matar, cuando por primera vez dije que Jesús tenía que ser justo. Después de todo, sabía que el Espíritu de Jesús era siempre justo. Sin embargo, justicia es hacer la voluntad del Padre.

Tú puedes reconocer que eres justo y eres tan perverso como cualquier hombre vivo. Reconocer que eres justo no tiene nada que ver con ser justo. La justicia es dejar que el Espíritu te guíe.

Romanos 8:4 nos dice:

4 para que la justicia de la Ley se cumpliera en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

La justicia de la ley es cumplida cuando tú caminas conforme al Espíritu y Jesús fue guiado por el Espíritu en el desierto para ser tentado por Satanás.

CAPÍTULO 4

JESÚS AGRADÓ AL PADRE

Jesús era guiado por el Espíritu Santo. Jesús siempre hizo las cosas que le agradaban al Padre. Mira en Juan 8:28. Estas son palabras que Jesús habló a los fariseos:

28 Les dijo, pues, Jesús:—Cuando hayáis levantado al Hijo del hombre, entonces conoceréis que yo soy y que nada hago por mí mismo, sino que, según me enseñó el Padre, así hablo

29 porque el que me envió, conmigo está; no me ha dejado solo el Padre, porque yo hago siempre lo que le agrada.

Recuerdas que en Juan 11:42, Jesús dijo que el Padre siempre lo escuchó. Aquí, Jesús dice: "yo hago siempre lo que le agrada". Y en primera de Juan 2:6, el apóstol Juan dijo que nosotros debemos caminar como Jesús caminó.

Si nosotros caminamos como Jesús caminó, Dios siempre nos oirá y podemos siempre hacer las cosas que le agradan a Él y nada más. Eso no es prueba y error. Eso no es "ganar algo, perder algo". Eso es la perfecta comunión con Dios, obediencia perfecta, haciendo lo que Dios quiere que tú hagas. Las únicas cosas que tú siempre harás, son esas cosas que agradan a Dios.

Ahora, si tú haces lo que a Dios le agrada, tú no vas a satisfacerte. Dios te probará en todo camino antes de que Él te de mucha responsabilidad, para averiguar si tú quieres agradarte a ti mismo o si tú siempre harás esas cosas que a Él le agradan.

Yo no sé de algo, hoy en mi vida, que no es agradable a Dios. Si lo hice, le pediría a Dios que haga algo al respecto. No te estoy diciendo que no he hecho nada, te estoy diciendo que no sé de algo.

Si estuviera haciendo algo que no era agradable a Él, dentro de algunas horas Él me lo diría. Ahora, no le toma mucho tiempo a Dios llegar a mí. Solía tomarle mucho tiempo. Pero yo no temo, decirte valientemente que lo que estoy haciendo ahora, es agradable a Dios.

¿Sabes cómo sé, que lo que estoy haciendo hoy es agradable a Dios? Porque valientemente lo diré.

Si valientemente, sin vergüenza, ante la gente dices que tú agradas a Dios y no estás diciendo la verdad, Dios te parará y dirá: "Un momento, te mostraré que tú no me estas obedeciendo". Nunca pienses que tú puedes agradarte a ti mismo.

Cada vez que digo esto, Yo expreso: "Bueno, gloria a Dios, vamos a averiguarlo, ¿verdad?" Pero yo sé lo que le agrada a Dios. Y lo bendice a Él, que tú y yo lo obedezcamos y confiemos en Él.

Aprende a Confiar en Dios

Justo después de que yo me convertí en cristiano, estaba en mi granja en Missouri. En la granja había un establo con un techo de lámina. Un lado del establo tenía un techo bajo, pero en el otro lado, el techo repentinamente cae directamente al suelo, 25 pies (7.62 metros).

Un par de clavos estaban saliendo del techo de lámina, así que le pregunté a mi padre que agarrara un extremo de la cuerda mientras yo caminaba hacia el borde del techo y clavar la lámina. Tomé mi martillo, algunos clavos y una cuerda, mi padre se sentó arriba del establo agarrando la cuerda mientras yo caminaba hacia el borde del techo.

Mientras yo estaba sentado ahí, Dios me dijo: "Tú confías en tú padre terrenal en que te mantendrá en este establo". Yo dije: "Seguro, él no me soltará". Dios dijo: "¿Por qué no confías en mí así?" Yo dije: "Tienes que estar bromeando".

Dios me ha dado algunas lecciones prácticas. Ahí estaba, 25 pies (7.62 metros) sobre el suelo, sentado en el borde del techo, colgado de la cuerda y Dios me dijo: "Tú confías en tú padre terrenal en que te mantendrá aquí. Ese es el modo en que yo quiero que confíes en Mí, confía en Mí, cuando tú estés al borde del precipicio, a punto de despeñarte, Yo no te dejaré caer".

Nunca he olvidado lo que Dios me dijo, aunque fue hace 20 años. Yo recuerdo eso, pero no me acuerdo, cuando recibí a Jesús.

Es importante recordar que tú estás más que salvado. Es importante que recuerdes las palabras que Dios habla en tú corazón acerca de confiar en Él, porque confiando en Dios es la cosa más grandiosa que tú puedas hacer. Confiando en Él te mantendrá salvo.

Te estoy enseñando a creer en Dios y siempre hacer las cosas que le agradan a Él. Cuando haces las cosas que agradan a Dios y tú no haces nada excepto las cosas que a Él agradan, Él siempre te bendecirá. Él te protegerá. A sus ángeles mandará cerca de ti y ellos no van a dejar que tú pie tropiece en piedra. Pero tienes que aprender a confiar en Dios.

El apóstol Pablo dijo que él aprendió a ser suficiente en cualquier estado que él estuviera. Él no dijo que un día era salvo y de repente él era suficiente. Él dijo que aprendió a ser suficiente.

Dios Te Probará

La palabra "aprender" quiere decir "con instrucción y experiencia". Tú aprendes con experiencia. Tú te encontrarás en una situación extraña, oirás a Dios y confiarás en Él y Él dirigirá tu camino.

Dios probará tú espíritu en todo camino. Él te probará en cada relación. Él te probará en todo lo que tú hagas para averiguar si tú vas a escucharlo. Si siempre haces lo que le agrada a Él, entonces, después de pasar el examen, Él va a decir: "Bien el examen terminó y ahora las bendiciones son tuyas".

La mayoría de los cristianos no creen en esto. Ellos han sido enseñados que Jesús fue probado, para que ellos no tuvieran que serlo. Déjame decirte, tú vas a tener una prueba todos los días con Dios. Cada mañana Dios dirá: "Bueno, hoy nosotros te guiaremos en el camino de justicia".

Satanás Tratará de Obstaculizarte

Cuando Dios te guía en caminos de justicia, Satanás está parado en cada salida, diciendo: "Ven aquí, ven aquí". Hay una salida cada 15 pies (4.57 metros). Si saltas fuera del camino hacia la salida, Satanás te tiene.

No estoy tratando de asustarte; simplemente te estoy diciendo que no escuches cada voz que oigas. Satanás vendrá y hará cualquier cosa, que pueda obstaculizarte.

Un día yo estaba alabando y adorando a Dios y escuché al demonio decir: "Yo te voy a matar hoy". Yo dije: "¡No, tú no lo harás!" Él dijo: "Tú has hecho algo que no me agrada y te voy a matar".

Yo dije: "¡No, tú no lo harás, demonio! Yo conozco quien eres. Yo conozco tu voz. Yo agrado al Padre de espíritus, no a ti". Eso duró cinco o diez minutos, luego él me dejó.

Ese es el modo en que el demonio te hablará. Él estaba tratando de convencerme que él era Dios, que yo había hecho algo que Dios no le gustó y que Él me iba a matar por eso.

Tú tendrás esa clase de ataques. Ya no tengo miedo cuando esos ataques vienen. Simplemente digo: "No, tú no lo harás. Yo conozco a mi Padre. Y yo siempre hago las cosas que le agradan". El demonio no ha dicho que él iba a matarme en varios meses.

No solamente me lo ha dicho, lo ha tratado. El ladrón viene a matar, hurtar y destruir. Si tú cedes al demonio, él tomará ventaja de ti. Tú tienes que resistir al demonio cuando él viene. Tú no puedes darle lugar al demonio.

Dejar Tú Vida

Déjame decirte algo, Yo me gradué de la Universidad de Missouri en 1962, después de que había estado en la Marina durante cuatro años. He estado fuera de los Estados Unidos y he hecho muchas cosas en mi vida. Yo tuve muchos éxitos carnales.

Cuando yo empecé a aprender sobre obedecer a Dios y descubrí que a menos que yo le obedeciera, yo iba a ser un hijo ilegítimo, yo tuve que tomar algunas decisiones. Yo tenía que decidir si yo quería seguir a Dios o no. Me senté y empecé a pensar.

No tenía algún problema en el mundo cuando yo recibí a Cristo. Yo era un pecador, el mayor de todos, pero nada me molestaba seriamente. Yo no estaba enfermo. Nadie en mi familia estaba enfermo. No tenía problemas financieros. Yo era una persona afortunada, francamente.

Pero Dios me había estado visitando alrededor de 12 años y los últimos dos años, 1968-1969, Dios me habló día y noche. De hecho, ahora lo sé, que Él puso un ángel del Señor en el asiento de enfrente del lado derecho de mi automóvil.

Era un practicante veterinario en el área equina en el Norte de Texas y otras áreas en los Estados Unidos y yo manejé miles de millas (kilómetros). Ese ángel se sentó en mi carro día y noche. Cada vez que me subía al carro él estaba ahí preguntando: "¿Por qué no predicas el evangelio? ¿Por qué no obedeces a Dios?"

Yo estaba tan frustrado y pensé: "¿Por qué no te sales de mi carro? ¿Por qué no me dejas en paz?" Pero le doy gracias a Dios que Él no lo hizo.

Considera Tú Vida

Yo tenía que considerar la vida que había vivido. Tenía que considerar lo que vi escrito en las escrituras. Llegó a ser muy obvio para mí que si las escrituras significaban lo que dicen (y yo ni siquiera creía eso), había muchos grandes logros y mayores bendiciones disponibles para mí por obedecer a Dios que continuar caminando en la carne.

Siempre he sido la clase de persona que pensaba las cosas. Jesús me dijo una vez: "Tú no puedes hacer algo a menos que puedas entenderlo en tu mente, ¿verdad?"
En ese tiempo, yo no sabía que pensar y dije: "Exactamente, tú estás en lo correcto, Jesús". Ahora sé que Jesús estaba burlándose de mí y hoy en día, puedo hacer cosas sin entenderlas en mi mente.

Yo siempre aprecio lo que Dios ha hecho por mí. Todavía uso mi mente para leer y estudiar. Todavía pienso, pero pienso en las cosas de Dios, las cosas que son puras, las cosas que son justas, las cosas que son preciosas, las cosas que son verdad, las cosas que son honestas. Eso es, en lo que mantengo mi mente, casi todo mi tiempo ahora.

Toma Su Vida

De todos modos, como yo consideré que podía caminar perfectamente ante Dios y que siempre podía hacer esas cosas que le agradan, decidí que quería hacerlo. Entonces encontré que era incapaz de hacerlo. Ahí es donde entra Dios. Si tú haces la decisión de que quieres seguir al Señor Jesús, Él tomará tu vida.

Tú no puedes simplemente decidir seguir a Jesús. Él tendrá que guiarte. Tú tendrás que dejar tu vida y tomar la de Él. Tú eres incapaz de seguir al Señor Jesucristo en la carne. Tendrás que poner tu cuerpo a morir a través del Espíritu.

Si quieres seguir a Jesús, tendrás que tomar Su vida resucitada. Caminar como Él caminó en la tierra, siendo guiado por el Espíritu, haciendo siempre lo que agrada al Padre y que el Padre siempre te oiga. Cuando tú lo haces, las bendiciones, la paz y todas las cosas que vienen a ti por obedecer al Señor Jesucristo serán las más grandes bendiciones y logros que alguna vez tú experimentarás en la tierra.

CAPÍTULO 5

HAZ LA VOLUNTAD DEL PADRE

En el cuarto capítulo del libro de Juan, los discípulos de Jesús habían ido a la ciudad para conseguir algo de comida. Mientras ellos se habían ido, Jesús habló con la mujer del pozo. Cuando los discípulos regresaron con comida, Jesús dijo en Juan 4:32:

32 Él les dijo:—Yo tengo una comida que comer, que vosotros no sabéis.

33 Entonces los discípulos se decían entre sí:—¿Le habrá traído alguien de comer?

34 Jesús les dijo:—Mi comida es que haga la voluntad del que me envió y que acabe su obra.

Jesús decidió hacer la voluntad del Padre en vez de comer. ¿Podrías decir: "Yo no quiero comer; voy a hacer la voluntad del Padre; eso es mi comida" y privarte de comida? ¿Podrías privarte de cualquier cosa en tu vida y decir: "Yo voy a hacer la voluntad del Padre; eso es mi comida; esa es mi fortaleza?” Ese es el modo que Dios te guiará.

Tú maestro favorito de la Biblia vendrá a la ciudad y Dios te enviará hacer otra cosa. Algunos cristianos corren de un seminario a otro, de un maestro de la Biblia a otro. Ellos no saben si Dios quiere que vallan o no. Su maestro favorito viene y ellos simplemente tienen que ir.

No hagas a cualquier cosa o persona un ídolo. Sabes esto, que el hombre no vivirá solo de pan, pero de cada palabra que procede de la boca de Dios.

Tú Puedes Oír a Dios

Pasa a Juan 5:17-20. Estos son versos excepcionales y la gente que va a seguir a Dios tendrá que caminar de acuerdo a ellos. Mi oración para América y el mundo es que Dios abra los oídos y los ojos de la raza humana, así la gente pueda oír y obedecer a Dios.

Tú preguntarás: "¿Por qué tú piensa que puedes oír a Dios?" Todo lo que puedo decirte, es que yo puedo y no me avergüenzo de decirlo. Dios ha traído mi vida a un lugar donde yo puedo oírlo y obedecerlo. Si eso te parece orgulloso, lo siento. Pero si tú tienes suficiente humildad, tú puedes al menos decir que si Jesús oyó a Dios, yo también puedo.

Yo sé que algunas de las personas que están alrededor de mí, a veces tienen problemas con el camino que Dios me guía, pero es Dios y ellos no me molestan. Este ministerio trabaja perfectamente, justo como el ministerio de Jesús fue. A este ministerio nada le falta.

Además, Dios me dijo hace seis o siete años, que Él no me guiará a equivocarme y yo le creo. Así como yo he continuado caminando como Jesús caminó, yo veo más y más claramente que los cristianos no tienen que continuar viviendo en pecado, equivocándose, cayendo en errores y no considerar lo que Dios quiere. Jesús no lo hizo y Él tampoco quiere que tú lo hagas.

Jesús Ignoró El Sábado (Día de Reposo)

Juan 5:17 empieza:

17 Jesús les respondió:—Mi Padre hasta ahora trabaja, y yo trabajo.

18 Por esto los judíos aun más intentaban matarlo, porque no sólo quebrantaba el sábado, sino que también decía que Dios era su propio Padre, haciéndose igual a Dios

En el verso 18 dice que los judíos intentaban matar a Jesús porque Él quebrantó el sábado (día de reposo). Sin embargo, en Lucas 16:16, Jesús le dijo a los Fariseos que la ley y los profetas fueron predicados hasta Juan el Bautista pero desde entonces el Reino de Dios es predicado.

Jesús ignoró el sábado (día de reposo). Él ignoró los Díez Mandamientos. ¿Por qué? Porque el Reino de Dios fue predicado desde Juan el Bautista, no la ley. La iglesia de América necesita creer en eso.

¿Sabías qué bajo la ley de Moisés, si Jesús en realidad hubiese quebrantado el sábado (día de reposo), Él habría tenido que pagar el castigo? Solo la gente religiosa cree que Jesús quebrantó el sábado (día de reposo). El sábado (día de reposo) terminó con la predicación del Reino de Dios. Es por eso que Jesús pudo hacer lo que Él hizo.

Jesús No Hizo Nada Por Sí Mismo

Juan 5:19 continúa:

19 Respondió entonces Jesús y les dijo: De cierto, de cierto os digo: No puede el Hijo hacer nada por sí mismo, sino lo que ve hacer al Padre. Todo lo que el Padre hace, también lo hace el Hijo igualmente.

Esta es una declaración humilde: "No puede el Hijo hacer nada por sí mismo".

Ese es el modo en que Jesús caminó en la tierra. Él era el hijo de Dios. Él era el Mesías. Él era Dios. Según Juan 5:18, Él dijo que Dios era Su Padre, haciéndose igual a Dios.

Sin embargo, a pesar de que Jesús era Dios, Él no hizo algo por sí mismo. Nada. Él no tomó el Antiguo Testamento y predicó, ni tampoco debemos tomar el Nuevo Testamento y predicar. Él sólo hizo lo que el Padre le dijo que hacer. Él nunca predicó a menos que el Padre lo mandará.

¿Qué dice en el verso 19? "El hijo no puede predicar nada sin el Padre". Tú puedes decir: "Eso no es lo que dice". Sí lo dice: "No puede el Hijo hacer nada por sí mismo, sino lo que ve hacer al Padre".

No Hagas Algo Por Ti mismo

Los predicadores necesitan ver, que sin el Padre, su predicación es en vano. Tú no puedes tomar el libro de Mateos y predicar. Dios te mandará en el Espíritu con los versos que Él quiere que hables y después Él te hará decir lo que Él quiere.

Mis casetes de enseñanzas nunca son iguales. Yo no tengo notas. Simplemente tengo referencias de las escrituras, porque no sé lo que voy a decir acerca de un verso hasta que yo hablo. ¿Por qué? Porque yo no puedo hacer nada por mí mismo. Jesús me enseñó eso.

Algunos de ustedes pueden haber dicho o escuchado que Dios les dio ciertos talentos cuando nacieron y que Dios quiere que uses esos talentos como Él pretendía que lo hicieras. Jesús no caminó de ese modo y tú tampoco deberías.

Jesús dijo en Juan 5:19:

…No puede el Hijo hacer nada por sí mismo, sino lo que ve hacer al Padre.

Dios me enseñó: "Tú no puedes hacer algo por ti mismo. La única cosa que tú puedes hacer es continuar orando, creyendo y darme una oportunidad de realizarla".

Dios Te Enseñará Todas Las Cosas

Jesús continúa en Juan 5:19:

19 …Todo lo que el Padre hace, también lo hace el Hijo igualmente,

20 porque el Padre ama al Hijo y le muestra todas las cosas que él hace; y mayores obras que éstas le mostrará, de modo que vosotros os admiréis.

"…El Padre ama al Hijo y le muestra todas las cosas que él hace:…" En el Antiguo Testamento, en el libro de Amós, está escrito que Dios no hace algo a menos que Él lo revele a sus siervos, los profetas. Jesús dijo que el Padre le mostró a Él todo. Él le mostró todas las cosas que Él mismo hace.

Si Dios puede encontrar una persona en la tierra, quien lo obedezca a Él, lo escuche, le espere, ore y busque Su rostro, Dios le mostrará todas las cosas que Él está haciendo a través de la vida de esa persona.

Dios te llevará tan lejos como tú estés dispuesto a ir. Tú tienes que venir a un lugar que sabes que no puedes hacer nada por ti mismo antes que puedas obedecer a Dios.

La gente dice: "Bueno, tú no puedes siempre saber acerca de Dios". ¿Sabes lo que eso me dice? Ellos no lo conocen. Ellos no saben algo acerca de Él. En Juan 5:20 dice: "Él le muestra todas las cosas". El Padre mostró al Hijo todas las cosas que Él hizo. Él nos mostrará. Si Él no nos muestra, no deberíamos hacerlo.

No Seas Tan "Espiritual"

Ahora, yo he conocido algunas personas quienes son tan "espirituales" que oran si ellos deberían comer. Yo le he preguntado a la gente, si a ellos les gustaría ir a comer y me contestaron: "Necesito orar acerca de eso".

Eso no me molesta si tú estás caminando en el Espíritu, porque Dios tal vez no quiera que comas conmigo. Sin embargo, si te invito hay una buena probabilidad que Dios quiere que vayas. Yo lo sé, porque Dios me lo ha dicho: "Yo quiero que los o las invites a comer".

Hay un hombre en la Iglesia de Water of Life que vino una mañana en domingo con su esposa y cuando estábamos alabando a Dios, Dios me dijo: "Lleva a esa familia a almorzar". Después del servicio caminé hacia ellos y les pregunté: "¿Les gustaría ir a almorzar?" Ellos dijeron: "Sí". Dije: "Bueno, es un regalo de Dios".

Ellos fueron a almorzar conmigo. Miles de visitantes han estado en esta iglesia a quienes no invité a almorzar. Esta familia todavía asiste a esta iglesia.

Otro hombre vino a esta iglesia y la primera vez que vino, Dios me dijo: "Llévalo a almorzar". Lo llevé a almorzar y hablamos por una hora y media acerca de Dios. Yo lo llevé a almorzar dos o tres veces más y compartí con él acerca de Jesús.

Él no creía en algo. Él no está aquí ahora. Dios le dio una oportunidad, que tal vez nunca podría tenga otra de nuevo.

Mayores Obras Que Éstas

Mira el resto de Juan 5:20:

"…y mayores obras que éstas le mostrará, de modo que vosotros os admiréis".

Si Dios tiene un mensaje para ti, no te sorprendas si Él te lleva a un lugar para hablarte. Igualmente, si Dios te manda alguien para hablarte, si eres inteligente, tú oirás y darás gracias a Dios. No son las obras de esa persona, son las obras del Padre. El Padre le enseñará a esa persona que hacer.

Déjame decir esto, nadie quien lea este libro o escuche mis casetes (tapes) o venga a la Iglesia de Water of Life recibe algo de mí. Lo que recibes por medio de mí son las obras del Padre trabajando en mí. Él me muestra que hacer o no lo haré. Así que no digas: "Doyle, quiero darte las gracias". En vez de eso, dale Gracias a Dios. Aprecio tu cortesía, pero aprecio mucho más tú obediencia a Dios.

Nada me haría más feliz que ver a cada uno que lea este libro camine en el Espíritu, obedezca a Dios, eche fuera demonios, sane a los enfermos, resucite a los muertos, limpie a los leprosos, camine en prosperidad, predique el evangelio y haga que la gente hable en lenguas. Si todo lo que me dices es: "Hola, Doyle" y haces esas cosas, será suficiente para mí. Olvídate del resto, porque me sentaré y maravillaré de lo que Dios ha hecho en tu vida. Eso me haría muy feliz.

Yo no necesito tus cumplidos. El elogio es ver mi carta escrita en ti, leída por el mundo. Eso es lo que hizo Jesús. Cuando tienes a Cristo en ti y el reino de Dios, tú no querrás el honor del hombre. Tú solo desearás el honor de Dios.

CAPÍTULO 6

JESÚS JUZGÓ COMO ÉL OYÓ

En Juan 5:30, Jesús dice:

30 No puedo yo hacer nada por mí mismo; según oigo, así juzgo, y mi juicio es justo, porque no busco mi voluntad, sino la voluntad del Padre, que me envió.

Yo recuerdo que durante los años setentas, cuando Dios me empezó a levantar como apóstol y profeta, Dios comenzó a juzgar con mi boca. Yo estaba preocupado, porque yo crecí en un hogar Cristiano y mi madre sin duda alguna sabía Mateo 7:1: "No juzguéis, para que no seáis juzgados", como casi todos los Bautistas hacen.

Yo sabía que podría meterme en problemas juzgando y yo no quería ser parte de eso. Yo no quería estar involucrado en juzgar a la gente de Dios ni a cualquiera.

Entonces yo vi que Jesús dijo: "Según oigo, así juzgo". Desde que he aprendido a caminar en el Espíritu y a obedecer a Dios, las personas vienen a mí haciendo toda clase de declaraciones y acciones rebeldes y yo ignoro lo que están diciendo y haciendo. Entonces, de repente la persona equivocada con el espíritu malo vendrá y el poder de Dios en mí, se levantará de un salto en mi corazón y según oigo, así juzgo y yo habló.

Una vez a principios de los años setentas, un predicador que fue bautizado en el Espíritu Santo y su esposa me pidieron que enseñara la Biblia en su iglesia. Lo hice. Un hombre de la Universidad de Yale estaba también en la iglesia. Ese hombre pensó que Dios lo había enviado a él, pero era simplemente un pastor carismático perdido en América, corriendo en círculos, tratando de encontrar un lugar en donde residir.

El pastor y su esposa querían que yo enseñara en su iglesia, pero ellos no querían que yo instruyera el consejo completo de Dios. Ellos querían que les enseñará su camino.

Un día estaba yo con ellos y de repente el poder de Dios salió de mi boca, más cortante que una espada de dos filos y reprendió al pastor como con diez palabras. El hombre de Yale dijo: "Tú tienes mucha amargura en ti. Tú necesitas perdonar a la gente religiosa". Yo pensé: "Bueno, si es así, así es".

Pero yo sabía que lo que había dicho venía de lo más profundo de mí y Dios empezó a ministrarme: "No eres tú. Soy Yo en ti. Soy Yo en ti, juzgando los espíritus en esas personas".

Desde entonces, en cualquier evento ese pastor y su esposa han estado en problemas la mayoría del tiempo sino es que toda su vida, porque ellos trataron de parar el movimiento de Dios. La personas que piensan por un momento, que ellas pueden resistir el movimiento del Espíritu Santo no son muy inteligentes.

El Juicio de Jesús Fue Justo

Veamos otra vez en Juan 5:30:

…según oigo, así juzgo, y mi juicio es justo, porque no busco mi voluntad, sino la voluntad del Padre, que me envió.

Jesús es tu ejemplo. Eso es de lo que estamos hablando, como Él se comportó en esta tierra, como Él se comunicó con el Padre, como Él fue siempre dirigido por el Espíritu, como Él siempre hizo lo que Él vio al Padre hacer, como Él siempre supo que el Padre lo oía y como Él sólo hizo las cosas que complacían al Padre. El juicio era parte de lo que Jesús hizo.

Si tú estás caminando en el Espíritu, el juicio saldrá de tu boca. Sin embargo, si estás caminando en la carne, tu juicio será en la carne y no será justo. Si estás caminando en el Espíritu, entonces, como Jesús dice aquí:

…mi juicio es justo, porque no busco mi voluntad, sino la voluntad del Padre, que me envió.

Si estás buscando la voluntad del Padre, tu juicio será justo, porque si estás buscando Su voluntad, tú solo juzgarás según tú oyes.

El Juicio Empieza en la Casa de Dios

Yo he visto que cualquiera que obedece a Dios, si él está en el ministerio de apóstol, profeta, pastor, maestro o evangelista, juicio saldrá de su boca. Tú puedes ver en el quinto capítulo del libro de los Hechos que el apostó Pedro juzgó a Ananías y Safira y ellos murieron.

Tú puedes ver en Hechos capítulo 13 que Elimas, el profeta falso, estaba intentando apartar de la fe al procónsul de Páfos. Pablo dijo: "La mano del Señor está contra ti, y quedarás ciego y no verás el sol por algún tiempo" y el hombre fue cegado por un tiempo. Cuando el procónsul vio lo que había sucedido, creyó, admirado de la doctrina del Señor.

Tú puedes ver en el capítulo 12 de Hechos, que el Rey Herodes había matado a Jacobo y procedió a prender a Pedro. Un día Herodes estaba hablando y un ángel de Dios lo hirió y murió.

El Juicio Es Para Corrección

El juicio está en la boca de la gente de Dios. El juicio no es para condenar, es para corregir. Sin embargo, la corrección puede ser hasta el punto de la muerte, si la gente no tiene la voluntad de aceptarla.

No hemos oído esa enseñanza en América. Nosotros hemos oído a los predicadores tratando de hacernos culpables, predicando: "Arrepiéntete o ve al infierno". Eso no es de lo que estoy hablando. Estoy hablando acerca de obedecer al Espíritu de Dios.

Deja que te diga algo acerca del Espíritu de Dios. 1 Pedro 4:17 dice que el juicio empieza en la casa de Dios. El juicio es instantáneo y ocurre para que la gente tenga temor de Dios.

El Juicio ha empezado en la casa de Dios en los Estados Unidos de América. En 1986, Dios me dijo: "El modo en que los predicadores de América toman ofrendas, esta ignorancia, la he pasado por alto. Pero ahora Yo les ordeno que se arrepientan por todas partes". Si tú revisas, tú encontrarás que los problemas financieros que los ministros experimentaron empezaron en enero de 1986. Y verás más ministros en problemas a menos que ellos se arrepientan.

CAPÍTULO 7

DIOS NO TE ECHARÁ FUERA

Los siguientes versos que quiero que veas son Juan 6:32-37. Jesús estaba otra vez hablando a los judíos, quienes habían pedido a Él les mostrara una señal, para que ellos pudieran ver y creer:

Entonces Jesús les dijo:

32 De cierto, de cierto os digo: Moisés no os dio el pan del cielo, pero mi Padre os da el verdadero pan del cielo,

33 porque el pan de Dios es aquel que descendió del cielo y da vida al mundo.

34 Le dijeron:—Señor, danos siempre este pan.

35 Jesús les respondió:—Yo soy el pan de vida. El que a mí viene nunca tendrá hambre, y el que en mí cree no tendrá sed jamás.

36 Pero ya os he dicho que, aunque me habéis visto, no creéis.

37 Todo lo que el Padre me da, vendrá a mí, y al que a mí viene, no lo echo fuera.

Si vienes al Padre en el nombre de Jesús con humildad, el Padre te traerá a Jesús, te perdonará y Jesús no te echará fuera. Deja de tener miedo de que vas a ser rechazado. Jesús murió por la gente cuando ellos estaban muertos en sus ofensas y pecados. Jesús no va a darse la vuelta y rechazarte después de que Él murió por nosotros. Eso sería ridículo.

Aunque es ridículo, yo lo he pensado también. Hubo tiempos a mediados de la década de los setentas cuando estaba tratando de trabajar mi camino a través de ciertos problemas espirituales, que no estaba seguro de lo que había hecho Dios conmigo. Tuve muchas personas religiosas ayudando a Satanás en tratar de convencerme de que Dios estaba rechazándome.

Gracias a Dios, tuve suficiente sentido para leer la Biblia, continuar leyéndola, estudiándola y creyendo lo que yo pudiera. Dios me ayudó en mi incredulidad. Él hacia un milagro cuando yo lo necesitaba y siempre me animó.

Yo siempre apreciaré como Dios me guio con señales y maravillas. Cada vez que parecía que no iba a lograrlo, Él llegaba con una poderosa señal y maravilla. Yo decía: "Oh, sí, todavía Dios está conmigo" y continuaba creyendo en Dios. Ahora mi fe se ha estado perfeccionado al punto que camino en prosperidad financiera, sanidad divina y otras bendiciones. Continuaré de este modo porque ese es la voluntad de Dios.

Vivir Por Su Fe

Habacuc 2:4 nos dice que hay una visión. La visión es: "El justo por su fe vivir,” eso es, por la fe de Dios. Romanos 1:16 nos dice que el evangelio es "el poder de Dios para salvación de todo aquel que cree, del judío primeramente y también del griego". Entonces, Romanos 1:17 dice:

17 pues en él [evangelio], la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: «Mas el justo por [Su] fe vivirá».

La justicia de Dios es revelada por fe y para fe. Entonces ¿Qué pasa? El justo vivirá por Su fe, por la fe de Dios. ¿Cómo obtenemos esa fe? Romanos 10:17 nos dice que la fe viene por oír el evangelio del Señor Jesucristo.

Todo esto es muy claro y absolutamente Bíblico. Sin embargo, si hay algo que reconozco internacionalmente, es el concepto religioso de pedir dinero. Yo no he estado en algún lugar donde la gente religiosa entienda de finanzas.

Yo nunca he pedido a alguna persona dinero. Nunca le digo a la gente que necesito dinero. Dios también quiere que te enseñe a dejar de pedir dinero. Deja de pedir dinero y empieza a creer en Dios. Si tú buscas el Reino de Dios, Su justicia y oras acerca de los problemas financieros hasta que Dios te provea, como yo he aprendido a hacerlo, el dinero se manifestará todo el tiempo.

La iglesia de América y la del mundo han sido enseñadas por mendigos a ser mendigos. Es por eso que los cristianos siempre están pidiendo dinero. La razón por la que tú siempre estás pidiendo dinero es porque no estás haciendo la voluntad del Padre.

Yo no tengo que preguntar por las finanzas. Déjame decirte, yo no soy uno de los hijos favoritos de Dios. Yo soy uno que le obedece. Porque yo lo obedezco a Él, su favor me rodea. La gente religiosa necesita dejar de llamar a las personas, escribirles y pedirles que oren por sus necesidades.

No le digo a nadie mis necesidades. No tengo porque. Tú no necesitas orar por mis necesidades. En lugar de eso, ora para que hable valientemente como debería hablar, como te están instruyendo en Efesios 6:20. Entonces estarás obedeciendo a Dios.

Jesús No Perderá Nada

Jesús continuó en Juan 6:38:

38 He descendido del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la voluntad del que me envió.

Para eso vino Jesús. Él no vino a hacer Su voluntad, pero la voluntad del que le envió.

Juan 6:39 sigue:

39 Y la voluntad del Padre, que me envió, es que no pierda yo nada de todo lo que él me da, sino que lo resucite en el día final.

40 Y ésta es la voluntad del que me ha enviado: que todo aquel que ve al Hijo y cree en él tenga vida eterna; y yo lo resucitaré en el día final.

¿Puedes ver esto? "…no pierda yo nada…" La voluntad del Padre es que tú no te pierdas. ¿Puedes creer esto? si tú lo crees, ¿Por qué estás tú tan nervioso acerca de perderte? Dios no pierde a la gente. La gente pierde a Dios. Ellos no lo siguen. No escuchan Su voz. Ellos no escuchan Sus palabras. Ellos hacen lo que quieren.

Yo No lo Echo Fuera

A principios de los setentas, cuando nadie me animaba, yo me animaba con Juan 6:37:

… y al que a mí viene, no lo echo fuera.

Yo encontré este verso y me aferré de él. Yo dije: "Bueno, yo voy hacia ti, Jesús y tú no puedes echarme fuera, porque Tú dijiste que Tú no lo harías. Yo te estoy creyendo y obtendré la victoria en esta situación. No seré derrotado".

No puedo contar las veces que he orado estos versos. Pero tienes que creerlos. Si tú los crees, tú los vas a orar.

Tú no vas a decir: "Oh Dios, ¿Qué es lo que me estás haciendo, déjame aquí, así?" Eso es solamente duda, incredulidad y un corazón duro.

Si tú crees en Dios, orarás el verso 37. Tú te aferrarás de ese verso cuando todo lo demás falla. Si crees en Dios, tú le dirás a Jesús: "Cualquiera que venga a Ti, Tú no lo echarás fuera". Y como Juan 6:40 dice: la voluntad de Jesús es "que no pierda nada, sino que lo resucite [a ti] en el día final".

Mira en Juan 6:40:

40 Y ésta es la voluntad del que me ha enviado: que todo aquel que ve al Hijo y cree en él tenga vida eterna; y yo lo resucitaré en el día final.

Si tú crees en Jesús, Él no te perderá. Tú no vas a ser dejado. Jesús no tenía miedo que el Padre lo iba a perder y Jesús no te va a perder. Pero tú tienes que creer en Él.

CAPÍTULO 8

LA DOCTRINA DE JESÚS ERA DE DIOS

Yo quiero mostrarte más versos que describen como Jesús se condujo en la tierra.

Empieza con Juan 7:14:

14 Pero a la mitad de la fiesta subió Jesús al Templo, y enseñaba.

Sus hermanos y hermanas lo habían estado reprendiendo, diciéndole que él debería hacer Sus obras abiertamente. Él les dijo en Juan 7:6, "Mi tiempo aún no ha llegado". Ellos fueron a Jerusalén y después ellos se salieron y Él los siguió.

El Espíritu Hace el Trabajo

Ellos no creyeron quien era Él. Sus propios hermanos y hermanas no reconocieron que Él era el hijo de Dios. ¿Puedes imaginarte vivir en una casa con Jesús? Si una vida puede influir a alguien, la vida de Jesús ciertamente debería haber influido en Sus hermanos y hermanas a creer que Él era el Mesías. Aún ellos no creyeron en Él.

Verás, es el Espíritu de Dios quien hace el trabajo. No es tu carne o tu vida. Necesitas entender que tú no puedes ser lo suficientemente bueno para influir en la gente.

Juan 16:8-10 nos dice que el Espíritu Santo nos convence de pecado, justicia y juicio. No son tus buenas obras o tu cara sonriente. No hay ningún problema con tu cara sonriente; tú simplemente no vas a influenciar a la gente con eso. Es el trabajo del Espíritu Santo.

Jesús es Mi Ejemplo

Mira en Juan 7:15:

15 Y se admiraban los judíos, diciendo: ¿Cómo sabe éste letras sin haber estudiado?

Jesús nunca había estado en un seminario. Él no se había sentado a los pies de ningún hombre. Él fue enseñado por el Padre. La doctrina que Él tenía fue la doctrina del Padre.

Jesús es mi ejemplo. Jesús no era un Fariseo. Él no era un Saduceo. Él no era un Herodiano. Él renunció a toda la religión de los Fariseos, Saduceos y Herodianos y todas las tradiciones de los hombres. Él no enseñó la doctrina de ellos. Él los hizo enojar. De hecho, si tú estudias la Biblia, tú puedes ver como el Padre envió a Jesús en el día de reposo, para enojar y provocar a los Fariseos, Saduceos y Herodianos.

¿Sabes lo que Dios está haciendo hoy? Él está provocando a la gente religiosa con palabras, señales y maravillas. La razón por la que no tengo algún problema en quedarme independiente de las denominaciones es porque Jesús era independiente. Yo no estoy amarrado a una denominación. La denominación no es, nunca ha sido, ni será de Dios. Tan pronto renuncies a tu denominación y la dejes, será mejor para ti.

La Doctrina Es de Dios

Juan 7:16 continúa:

16 Jesús les respondió y dijo: Mí doctrina no es mía, sino de aquel que me envió.

La palabra "doctrina": quiere decir "enseñanza". "Mi [enseñanza] no es mía, pero la de aquel que me envió".

Mira en Juan 7:17:

17 El que quiera hacer la voluntad de Dios, conocerá si la doctrina es de Dios o si yo hablo por mi propia cuenta.

Estos versos me convencieron en los setentas que si yo hago la voluntad del Padre, yo sabré si la doctrina del Señor Jesús es de Dios o no. El único modo en que tú sabrás que la Biblia es verdad es hacer la voluntad del Padre.

La razón por la que no crees en la Biblia, la razón por la que la Biblia no trabaja en tú vida, es porque nunca haces la voluntad del Padre. Si tú haces la voluntad del Padre y eres guiado por el Espíritu, tú sabrás que la doctrina que enseño es la doctrina del Padre.

Cuando empecé a ver como Jesús caminó, yo dije: "De acuerdo, Jesús. Toma mi vida y guíame. Yo no voy a hacer algún esfuerzo para hacer algo por mi cuenta. Yo quiero que me guíes". Él lo hizo y descubrí que esto funciona siempre. Lo que yo enseño no es mío. Según yo oigo, yo hablo.

Busca La Gloria Del Que Te Envió

Juan 7:18 declara:

18 El que habla por su propia cuenta, su propia gloria busca; pero el que busca la gloria del que lo envió, éste es verdadero y no hay en él injusticia.

No hay perversidad en una persona quien solamente quiere el honor de Dios.

Los hombres y las mujeres quienes quieren ser honrados por hombres están llenos de perversidades. Los hombres y las mujeres quienes quieren el honor de organizaciones, el honor de las denominaciones, o el honor de otros ministerios están llenos de perversidades. Jesús dijo que si tú buscas solamente el honor de Dios, Su gloria y dejas que Él sea glorificado en cada situación, no hay perversidades en ti.

¿Tienes tú perversidades en ti? ¿Te gusta ir por tu propio camino? ¿Tienes tu propio programa establecido en la iglesia o haces la voluntad del Padre? ¿Haces la voluntad del Padre o la tuya?

Si tú haces tú voluntad, tú estás lleno de perversidades. Si tú estás lleno de perversidades, tú estarás en problemas en alguna parte a lo largo del camino. La iglesia de América tiene que arrepentirse. Tiene que reconocer que ha estado en rebelión y debe de venir a Jesús.

Si tú buscas la gloria de Dios, tú eres verdadero y no hay perversidades en ti. Si no buscas la gloria de Dios, si tú quieres ir por tu propio camino y tienes el honor del hombre, tú no eres verdadero y estás lleno de perversidades. Tan pronto aceptes eso, mejor vas a estar.

Presenta Tú Cuerpo Como Sacrificio Vivo

Esto es espantoso ¿Sabías esto? Tú dices: "¿Bien qué tal si no soy verdadero?" Tú tendrás que hablar con Dios acerca de eso. Dios puede hacerte verdadero, si tú tienes voluntad de humillarte y presentar tu cuerpo como sacrificio vivo a Dios.

Dile a Dios: "Dios tú sabes que yo quiero mi propio voluntad. Tú sabes que yo quiero mi gloria. Tú sabes que quiero el honor del hombre y no el Tuyo". Dios dirá: "Seguro, Yo lo sé. Ahora que lo has admitido, yo puedo hacer algo contigo".

Yo nunca he esta tan asombrado como ese día que Dios me enseñó estos versos. No hay perversidades en una persona quien busca la gloria de Dios.

Buscando la gloria de Dios es el único modo de caminar. ¿Sabes por qué? Ese es el modo en que Jesús caminó. ¿Estás listo para el resto? Ese es el camino que nosotros debemos caminar. Se supone que debemos caminar como Él caminó, si nosotros permanecemos en Él.

Tú dices: "Esto es muy difícil". No, esto es imposible. Tú tienes que presentar tu cuerpo como sacrificio vivo a Dios y dejar que Él te guíe. Tú no puedes hacer esto por ti mismo. Por eso ninguna carne va a glorificarse en Su presencia.

Siento mucho desanimarte tanto en un momento. No, yo no lo estoy. Yo te estoy diciendo que la cosa más grande que te puede pasar es seguir a Dios.

CAPÍTULO 9

JESÚS ERA LA LUZ

Mira en Juan 12:44:

44 Jesús clamó y dijo: «El que cree en mí, no cree en mí, sino en el que me envió;

Si tú crees en el Señor Jesús, tú crees en el Padre.

45 y el que me ve, ve al que me envió.

Jesús dijo que si tú lo ves a Él, tú ves al Padre.

46 Yo, la luz, he venido al mundo, para que todo aquel que cree en mí no permanezca en tinieblas.

Jesús era la Luz y es la Luz. La Palabra de Dios es la luz y así tú no permaneces en tinieblas. Dios te guiará fuera de las tinieblas y te traerá a Su maravillosa luz. 2 Corintios 4:4 nos dice que el evangelio es la luz maravillosa.

Continuemos con Juan 12:47:

47 Al que oye mis palabras y no las guarda, yo no lo juzgo, porque no he venido a juzgar al mundo, sino a salvar al mundo.

48 El que me rechaza y no recibe mis palabras, tiene quien lo juzgue: la palabra que he hablado, ella lo juzgará en el día final.

Jesús no te juzgará. Sin embargo, si tú y yo no creemos en Sus palabras, tenemos un juez. Las palabras que Él habló nos juzgarán. Cuando tú y yo rechazamos las palabras de Dios, esas palabras nos juzgarán.

Oseas 4:6 dice:

6 Por cuanto desechaste el conocimiento, yo te echaré del sacerdocio.

El conocimiento que la gente rechaza es el conocimiento de Dios. Tú no puedes rechazar las palabras de Dios. Así que acepta la Palabra. Cree en la Palabra. Camina en la Palabra y no dejes que el demonio te la robe.

El Juicio Vendrá

En Julio de 1985, estaba orando un día y el Padre me dijo que América no podía distinguir la mano derecha de la izquierda. En una visión Él me mostró una torre como la de Babel. Él me dijo que la torre representaba confusión y que esa era Su iglesia.

Yo le dije: "Señor, yo no puedo aceptar que tu iglesia está totalmente confundida". Yo le dije que necesitaba ver algunas escrituras para confirmarlo y Él dijo: "Lee el libro de Jonás".

Así que lo hice y cuando llegué al final del libro, el último verso decía que había más de 120,000 personas viviendo en Nínive, quienes no podían distinguir entre su mano derecha y su izquierda. Dios me preguntó: "¿Tú crees que eso es confusión?" Yo dije: "Creo que sí". Él dijo: "Bueno, esa es Mi iglesia".

Entonces Él me dijo: "Voy a juzgar a América con tu boca". En ese tiempo, yo no entendí, pero finalmente vi que cuando las palabras de Dios son habladas por mi boca, el juicio ocurre.

No necesito estar presente para que el juicio ocurra. La gente no tiene que oírme hablar. Las palabras de Dios empezarán a juzgar y a corregir cuando ellas son habladas. Dios hará que la gente venga cara a cara con Sus palabras.

Tú dices: "Yo no creo eso". Bueno, yo tampoco lo creía. Pero puedes leer en Ezequiel 11:13 y ver que el Espíritu de Dios levantó a Ezequiel y le mostró 25 príncipes de Israel y le dijo que profetizara en contra de ellos. Cuando Ezequiel profetizó, uno de los príncipes murió. Si tú no crees que la palabra de Dios juzga, lee la Biblia.

El Padre Hace las Obras

Juan 12:49 continúa:

49 Yo no he hablado por mi propia cuenta; el Padre, que me envió, él me dio mandamiento de lo que he de decir y de lo que he de hablar.

El Padre le dijo a Jesús que es lo que Él debía de decir y que es lo que Él debía hablar.

50 Y sé que su mandamiento es vida eterna. Así pues, lo que yo hablo, lo hablo como el Padre me lo ha dicho.

Lo que el Padre dijo, Jesús habló.

En Juan 14:10, Jesús dijo:

10 ¿No crees que yo soy en el Padre y el Padre en mí? Las palabras que yo os hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre, que vive en mí, él hace las obras.

Las palabras no son de Jesús. El Padre está en Él y Él está en el Padre. El Padre quien vive en Él hace las obras. Es el Padre en mí quien hace las obras. Lo ves, tú y yo se supone que debemos caminar como Jesús caminó.

La Medida de la Importancia de Cristo

Las palabras que salen de mi corazón son la doctrina del Padre. Yo no te estoy enseñado; el Padre lo hace. Yo no soy un don para ti. La medida de la importancia de Cristo en mi es el don para ti. Yo soy un vaso de barro que deja que ese don trabaje.

Las personas necesitan parar de pensar que los predicadores son dones para la iglesia. También los predicadores necesitan parar de pensar que son dones. Los predicadores dirán: "No me toques". Ellos son simplemente barro. Yo los he observado. Alguien pasa cerca y ellos dicen: "¿Por qué me tocaste?"

Tú puedes tocarme en cualquier momento que quieras. Tú estarás muy decepcionado, a menos que el Espíritu Santo quiera darte un choque. El barro no ministra mucho.

Te quita toda la responsabilidad cuando descubres que tú simplemente eres barro, simplemente un vaso de tierra. Además, Dios te bendice por ser un vaso. Así es como Jesús caminó.

CAPÍTULO 10

JESÚS SE HUMILLÓ A SÍ MISMO

Antes de la Muerte, el entierro y la resurrección de Jesús, Él fue al Monte de los Olivos con Sus discípulos. Mira en Lucas 22:39-46:

39 Salió y se fue, como solía, al Monte de los Olivos; y sus discípulos lo siguieron.

40 Cuando llegó a aquel lugar, les dijo:—Orad para que no entréis en tentación.

Jesús les dijo que oraran. La oración no te dejará entrar en la tentación.

En el verso 41 continúa:

41 Se apartó de ellos a distancia como de un tiro de piedra, y puesto de rodillas oró,

42 diciendo: «Padre, si quieres, pasa de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya.»

La gente religiosa me impidió por años enseñar con exactitud esto. Ellos no son los responsables, sin embargo yo lo soy. Yo soy responsable por estar tan cegado y dejarlos.

En el verso 42, cuando Jesús se arrodilló, dijo: "Padre, si quieres, pasa de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya." Jesús estaba sufriendo cuando Él pidió en esta oración. Recuerda que Hebreos 2:18 dice que Jesús sufrió siendo tentado. De acuerdo con la Biblia, la única vez que sufres es cuando eres tentado a no creer en Dios.

En Hebreos 2:10 dice que Jesús fue hecho perfecto a través de los sufrimientos. En Hebreos 5:8 dice que Él aprendió obediencia a través del sufrimiento. Jesús experimentó cada tentación y entonces Él soportó la cruz.

En Marcos 14:33-34, otra cuenta de este evento, Jesús dice que Su alma estaba angustiada y triste hasta la muerte. La angustia estaba en Él. En Lucas, Él dijo: “Padre, si quieres, pasa de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya”.

Ya sea que aceptes esto o no, este fue un acto de humildad de Jesús. En Filipenses 2:8 dice:

8 se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.

Jesús se humilló a sí mismo y Él dijo: "… si quieres, pasa de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya."

Ha habido tres o cuatro veces en mi vida que he tenido que hacer decisiones difíciles y cada vez yo dije: "Padre, encomiendo esto a ti. Si he cometido un error, si es tú voluntad que haga otra cosa, bien; sino, bien. No obstante tú voluntad será hecha". El Padre confirmó mi decisión cada vez. Déjame decirte esto: La voluntad del Padre es que te ministre el evangelio y ese evangelio no fallará.

Los Ángeles Te Fortalecerán

Ahora, ve en Lucas 22:43:

43 Entonces se le apareció un ángel del cielo para fortalecerlo.

Si necesitas fortaleza, un ángel vendrá y te fortalecerá. ¿Cómo yo sé eso? Porque un ángel fortaleció a Jesús. Si Jesús necesitó un ángel para que lo fortaleciera, ¿Cuánto más, piensas tú que nosotros necesitemos ángeles que nos fortalezcan? Tal vez necesitemos dos o tres. Un ángel vino del cielo y lo fortaleció. Cuando necesites fortaleza, da gracias a Dios que sus ángeles te fortalecerán.

Dios me ministró esto una vez. Él dijo: "Voy a enviar unos ángeles para que te ministren y fortalezcan". Estaba asombrado. Yo pensé: "¿Qué quieres decir con ángeles que me ministren? Yo ni puedo ver ángeles". Bueno, por supuesto que no puedes ver ángeles hasta que creas en Dios.

Si tú crees en Dios, no te importará si ves ángeles. Cuando estás débil, si un ángel viene, te ministra y eres fortalecido, no te importará si tú lo viste o no.

Tú serás como el hombre ciego en Juan, capítulo 9. Los Fariseos le dijeron que los pecadores no pueden sanar. Él dijo: "—Si es pecador, no lo sé; (hablando de Jesús) una cosa sé, que habiendo yo sido ciego, ahora veo". Él pudo haber añadido: "Aún si Él es un pecador, Él hizo más de lo que ustedes pueden hacer".

Jesús Estaba En Una Lucha

Mira en Lucas 22:44:

44 Lleno de angustia oraba más intensamente…

Este es el modo en que Jesús oró. La palabra "angustia" viene de la palabra Griega "agonía" que quiere decir "lucha, conflicto". Dios me dijo una vez: "Tú entrarás en una lucha orando. Este es el modo en que tú Hermano oró".

44…y era su sudor como grandes gotas de sangre que caían hasta la tierra.

Yo no he estado en esa clase de lucha. Todavía no he experimentado orar a ese grado.

Ora Para Que No Entres En Tentación

Finalmente, mira en Lucas 22:45 y 46:

45 Cuando se levantó de la oración y fue a sus discípulos, los halló durmiendo a causa de la tristeza;

46 y les dijo:—¿Por qué dormís? Levantaos y orad para que no entréis en tentación.

Jesús les dijo otra vez como permanecer fuera de la tentación, orando. Si tú oras, no hay diferencia en como el demonio te tiente: no fallarás.

Si tú no oras, eres simplemente una tentación buscando un lugar para que pase. Créeme, es verdad. Cuando tú oras, no vas a fallar. Los ángeles te fortalecerán y tú podrás resistir la tentación.

Jesús hizo la voluntad del Padre. Él tenía una comunicación perfecta con el Padre y Él sólo hizo las cosas que vio al Padre hacer. Él fue guiado por el Espíritu, Su alma y cuerpo fueron hechos justos, por Su fe y Su obediencia.

Jesús se humilló a sí mismo y obedeció al Padre hasta la muerte, aún la muerte de la cruz. Y porque Jesús obedeció al Padre y creyó el evangelio, tú y yo somos capaces de caminar así como Él caminó.

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